Ya sabemos que somos incapaces de percibir la inmensa información que nos aporta el mundo en el que vivimos. Todos nosotros utilizamos filtros para poder procesar esta información y elaborar nuestro mapa del mundo y de esta manera poder movernos en él con facilidad. Estos filtros mentales están elaborados gracias a nuestra biología, nuestra cultura, nuestras experiencias, que hacen de cada uno de nuestros mapas una joya única y totalmente diferente al resto de los mapas de los demás. Es labor y responsabilidad nuestra enriquecer nuestro mapa gracias al conocimiento e interacción con los mapas de los demás.
Uno de los factores que afectan de manera significativa a nuestros mapas, es decir, a nuestra percepción del mundo son las emociones y los estados de ánimo.
Uno de los factores que nos puede ayudar a diferenciar ambos conceptos es el tiempo y el origen de ambos.
Mientras que una emoción tiene una duración muy breve en el tiempo, un estado de ánimo se prolonga bastante más. Igualmente las emociones tienen un origen muy definido mientras que los estados de ánimo suelen tener un origen incierto. Por ejemplo cuando alguien traspasa un límite en un momento determinado surge en nosotros el enfado, emoción vinculada a nuestros valores. Si alguien los trasgrede, esta emoción se hace presente de inmediato. Pero algo muy distinto es un estado de ánimo que una persona tiene y que le hace estar constantemente irascible impidiéndole disfrutar. Nos parece que está eternamente enfadado aunque no existe un motivo aparente para ello. Un estado de ánimo puede durar tanto tiempo que incluso una persona puede identificarlo como un rasgo propio de su personalidad.
La importancia de los estados de ánimo es que tienen la capacidad de alterar los hábitos de comportamiento de nuestro cerebro. Existen estados de ánimo que generan salud y energía positiva mientras que otros son terriblemente destructivos. Además los estados de ánimo colectivos actúan de manera similar en los grupos y en los equipos de trabajo.
En gran medida esto es lo que le ocurrió a la selección española de fútbol después de ganar la Eurocopa de 2008. El estado de ánimo del grupo generó un cambio de hábitos y de creencias en el colectivo que empoderó a sus jugadores para conseguir los campeonatos posteriores.
Si somos totalmente reactivos a las situaciones que nos ocurren lo único que conseguiremos será cumplir con la expectativa que tenemos puesta en nosotros. Si me considero torpe y cometo un error confirmaré mi torpeza y mi estado de ánimo destructivo se alimentará una vez más.
Pero somos capaces de elegir y sustituir esas respuestas automáticas por unas nuevas respuestas diferentes y más positivas.
Esa libertad interior está en nosotros mismos.
Buena semana a todos
Que bien suena la palabra Libertad. Y que gusto y sobre todo tranquilidad da saber que podemos elegir. Constantemente decidimos y elegimos, sin parar…siempre. Y esto es lo que nos hace ser los principales resposanbles de lo que nos pasa, de lo que vivimos, de nuestra vida. Y el estado de ánimo, como bien dices Alvaro, no va a ser menos…y también lo elegimos. Quizá no podamos elegir que aterrice en nosotros en un momento dado y bajo unas circunstancias determinadas, pero si podemos elegir cuánto tiempo queremos que se quede con nosotros y si nos interesa o no convivir con él. Asombra tanto el darse cuenta de cuantas cosas están en nuestras manos que a veces no podemos con tanta responsabilidad y tratamos de tirar balones fuera.
Gracias por recordarnos que el control de nosotros mismos lo tenemos nosotros mismos.
Besazos!!
I am already in Spain!!
La libertad, siempre lo vemos como un espírutu al cual no siempre podemos alcanzar(llamesele miedos, tabues, ignorancia, costumbres) porque tienes libertad para unas cosas pero no para otras, y lastimosamente siempre es convertida en libertinaje( en detrimento de su verdadero sifnificado y valor). Por lo que la libertad la percibimos en algo efímero que si nos duro 3 segundos seamos felices, en parte puede que sea cierto. Pero si logramos aferrarnos a ella y poder contagiar a nuestro entorno esos 3 segundos de felicidad, se pueden convertir en minutos y así sucesivamente porque habremos logrado que nuestro entorno, por contagio a repetición este feliz y nos continúe contagiando. Saludos desde Honduras.
Da mucha tranquilidad pensar que la herramienta más útil para estar bien y conseguir la felicidad es uno mismo.
Aprender a trabajarlo es un largo camino que, sin embargo, te proporcionará numerosos beneficios.
Gracias por compartirlo con nosotros!!
¡Gracias Álvaro!
Muchas veces en la velocidad del día a día (de la que nosotros somos altamente responsables) nos olvidamos de diferencia entre emociones y estados de ánimo. ¡Qué importante me parece analizar nuestro estado de ánimo contínuamente para “situarnos en nuestro mapa”! Creo que ya tengo una nueva tarea mañanera que realizar todos los días.
Bajo mi experiencia me resulta altamente sorprenderte como un estado de ánimo genera nuevas respuestas a diferentes contratiempos, expectativas no cumplidas o emociones negativas. Es como “cambiarse los ojos” ante lo que nos acontece.
Un fuerte abrazo
Cuanta razón tienes! Es cierto que aparejado al estado de ánimo van unidas unas series de emociones, que hacen del momento en el que realizas, tus acciones que sean mejores o peores para ti. Porque al fin y al cabo no podemos separar ambos estados, pero pensar en positivo y tener una capacidad positiva, aun cuando se ve todo más negro que atravesando un túnel, siempre hay que pensar que hay salida al final de ese túnel y cuanto mejor veamos nuestra posición antes saldremos de ese estado negativo en el que nos encontramos. Gracias una vez más por tus artículos! Son geniales e inspiradores!
[…] pasado Lunes por ejemplo, el post publicado fue titulado: “ELEGIR EL ESTADO DE ÁNIMO” os invito a que entréis lo leáis y si os gusta os animéis a seguirlo, leyendo los nuevos post […]
Aceptar y cultivar todos los estados de ánimo propios representa una fuente de enormes riquezas. Según una metáfora clásica, se trata de ser el tablero, en lugar de las piezas. No hay que intentar jugar las negras contra las blancas, lo positivo contra lo negativo, sino comprender que ambas polaridades nos resultan útiles. Y que, sin ambas, no hay partida, y por tanto ningún interés.”.
Me alegra haber encontrado tu blog, tras mucho tiempo de búsqueda, por fin se de ti.
Gracias por tus artículos, gracias por tus palabras, gracias por todo.
Eras y sigues siendo luz en mi camino.
Eso realmente nos debe poner a meditar. Es parte de nuestro día a dia. Si comenzamos el día dándole gracias a Dios por tantas bendiciones, ponemos nuestro estado de ánimo en positivo con el agradecimiento, programamos nuestro día de forma positiva. Mil gracias y muchos saludos,
UN SALUDO .MUY BUENO