Hace unos días ha fallecido uno de los grandes atletas de la historia. A los 88 años de edad ha fallecido Roger Bannister. Siempre será recordado por convertirse en el primer hombre en ser capaz de correr la milla imperial británica (1609metros) por debajo de 4 minutos. Era una barrera nunca superada por ningún atleta. Pero fue el 6 de mayo de 1954 cuando el atleta británico fue capaz de correr en Iffley Road, la pista de ceniza de la Universidad de Oxford, esa distancia en 3’59”4 rompiendo así una barrera que se había convertido en un reto para los atletas. Curiosamente Sir Roger Bannister alcanzó esta gesta un año después de que otro británico, Sir Edmund Hillary, hiciese cumbre en el Everest.
Su record duró poco más de un mes ya que 42 días después, el australiano John Landy batió su record corriendo en 3:58.
Tantos años esperando superar este límite y tan solo 5 semanas para que se rompiera dos veces.
Bannister reflexionó años más tarde sobre la importancia de haber derribado esta barrera: “Creo que su atractivo reside en su simplicidad: no exige dinero ni equipamiento ni un físico especial ni sabiduría ni educación. En un mundo de creciente complejidad tecnológica destaca como una declaración ingenua de la naturaleza humana. Usando simplemente sus dos pies, una persona puede superar tremendas dificultades para alcanzar una cumbre desde la que puede proclamar: nadie había hecho esto antes’”.
Hoy vivimos inmersos en un mundo donde los avances en la tecnología fruto de la llegada de la inteligencia artificial nos hacen más rápidos y más fuertes. Pero fue gracias a la sencillez de un atleta en una pista sencilla, con unas zapatillas artesanales y ropa de algodón quien abrió la puerta a un nuevo contexto de oportunidad.
El 50% de los atletas que actualmente corren por debajo de 4 minutos no serían capaces de hacerlo si compitieran en las mismas condiciones en las que lo hizo el atleta británico.
Esta proeza ha servido para inspirar a muchos atletas de todo el mundo a la hora de afrontar sus retos observándolos no como imposibles sino como muy complicados. Esa es el gran legado que nos ha dejado este deportista más allá de su record deportivo.
https://www.youtube.com/watch?time_continue=12&v=9JxNY-G6LUM
La milla milagro es un ejemplo de la multitud de espacios de oportunidad que se pueden crear cuando miramos la realidad a través de los ojos de un Bannister con 25 años, cuando pensaba que era posible algo que otros muchos veían imposible.
Tanto es así para algunos, que incluso nos ha llevado a inspirarnos profesionalmente en esta hazaña y darle nombre a nuestro proyecto profesional: 359.es