Esta semana os traigo una bonita historia deportiva de uno de mis ídolos. Os hablo del atleta etíope Haile Gebrselassie.
Contar su historial deportivo sería perderse en un listado innumerable de medallas olímpicas y en campeonatos del mundo sobre su distancia favorita: los 10.000 metros.
Pero lo que realmente hace que su historia deportiva tome verdadero valor es la manera con la que este deportista ha afrontado cada uno de sus retos.
Como bien dice en el video que os adjunto Haile habla de cómo la confianza solo se consigue entrenando. Hasta tal punto llegó su confianza que le llevó a afrontar un nuevo reto más allá de la distancia que le había hecho uno de los atletas más laureados de la historia. Ahora se enfrentaría a la más importante de todas las pruebas atléticas: la maratón.
Tal fue el poder de su confianza que llegó a dejar en evidencia al eminente matemático Jan Magnus, especializado en la econometría y considerado como uno de los mayores expertos en estadística y matemáticas. Magnus, junto a John Einmahl, también profesor de la universidad de Tilburg, se sentó frente a un ordenador y comenzó a desarrollar complicadas fórmulas matemáticas para desarrollar la teoría del valor extremo. Uno de los apartados contenía hasta dónde podían llegar los récords mundiales de atletismo. No incluían todas las pruebas. El rigor del estudio obligaba a hacerlas sólo sobre aquellas en las que era posible realizar una estimación real. Salieron récords increíbles. Por ejemplo: 9”29 en 100 metros. Analizando estas marcas podría asegurarse que estamos hablando de récords extremos, donde se situarían los límites del hombre y de la mujer. En estos mismos límites situaba el récord del maratón masculino en 2h04’06’’.
Bien, pues el 28 de septiembre de 2008 Gebrselassie establecía un nuevo record del mundo en esta distancia en las 2h03’58” desafiando los límites humanos y las teorías matemáticas.
En una entrevista al diario ABC Haile Gebrselassie decía: “Mi mayor ídolo es Nelson Mandela. Él nos enseño la dureza, la necesidad de ser pacientes y saber esperar. Quizá comparar dos décadas de asfixia carcelaria con 35 kilómetros de carrera diaria sea sumamente arriesgado, pero el horizonte es el mismo: gloria y resistencia, ya sea política o deportiva.
http://www.youtube.com/watch?v=Myc2tFaU0QE
En 2011 recibía el premio Príncipe de Asturias de los deportes y este año fue uno de los porteadores de la bandera olímpica en los JJOO de Londres 2012.
Una historia muy inspiradora para iniciar la semana
Me quedo con esta frase de Haile: “Not to be fast not be slow”. Muchas veces solo nos preocupamos si vamos rapido o lento y no nos preocupamos por ser estables, conseguir un balance. Un abrazo desde Honduras!
Álvaro, has dado con uno de mis ídolos. Y no sólo lo es por todos sus logros deportivos, como tú indicas… larguísimos, sino por esa eterna sonrisa en su rostro y por ser una gran PERSONA además de un admirable atleta.
http://www.youtube.com/watch?v=rF3EA3Ygy2U
Me leo con mucho gusto todos los artículos que escribes y me gustaría tener algo más de tiempo para poder añadir mis comentarios.
Un abrazo y a perseverar